Parrilla Paraíso un restaurante de mar y tierra al sur de la CDMX.

Una parrilla, el paraíso y un buen sabor de boca al sur de la CDMX

¿Qué sería lo primero en lo que piensas cuando estás por elegir un restaurante para comer? Seguramente la calidad de la comida, de ahí que el lugar sea agradable, y por último quizás el tema de la ubicación, aunque si te gusta descubrir sitios, esto queda a veces en segundo plano; y cuando encuentras esto en un mismo lugar, comienza la magia del sabor.

Parrilla Paraíso es un restaurante que para nosotros fue un gran descubrimiento al sur de la Ciudad de México, donde la distancia es lo de menos una vez que degustas sus exquisitas viandas.

El restaurante encendió sus fogones y las brasas en diciembre del 2018, cuando Andrea Ramos Stierle, Rodrigo Puchet Dutrenit y el chef Édgar Delgado, tres apasionados de la gastronomía y de la experiencia que se crea alrededor de una mesa al comer, coincidieron que era necesario transmitir esa emoción a las demás personas. Pusieron manos a la obra y surgió un concepto que une la cocina de mar y tierra, pues por un lado están los sabores de Baja California que encantan al chef y por el otro los asados uruguayos.

Una pizca de historia

Como dato, la tradición de los asados en Uruguay surgió por ahí de los siglos XVIII, XIX, con los gauchos, manera a la que se le llamaba a las personas que hoy conocemos como jinetes, especialmente en países como Uruguay, Paraguay, Argentina y algunas regiones de Chile y de Brasil.

Estos personajes tenían de una u otra manera relación con el ganado vacuno, pues la venta de estos era su principal fuente de ingresos, pero también su alimentación se basaba en el asado de sus carnes. De hecho, la figura del gaucho hoy en día se considera un ícono de esas zonas.

Pero ¿qué es lo que hace extraordinario a este lugar? De entrada su comida, la propuesta culinaria es diversa, y la hay para grandes y pequeños, porque además, Parrilla Paraíso también se preocupa por que los niños también se la pasen bien, incluso, hay una zona pensada completamente para ellos: el Paraíso de las Infancias, ahí podrán brincar, correr, gritar, reírse y sentirse completamente libres.

A lo que venimos

En cuanto llegas las brasas están a la vista, el aroma, ya te imaginarás, pues las mesas están distribuidas en un espacio abierto. La atención, es algo que también se agradece, todos están al pendiente de lo que necesitas.

Tuvimos la suerte de encontramos con Rodrigo Puchet, y platicando con él nos contó que “la intención es brindar una experiencia más familiar como se hace en las casas en Uruguay, en donde todo se comparte, en donde se empieza con una picadita de chorizo o morcilla, empanadas, ensaladas, cortes, verduras a la parrilla y los postres. Es nuestra tradición que un asado empiece entre la 1 de la tarde y acabe como a las 6”. Nosotros no nos quedamos tanto tiempo, pero comimos de todo.

Llegó la hora de comer. La recomendación es comenzar con una empanada de mix de quesos con poro y cebolla o para probar una más tradicional, la Pascualina, rellena de espinaca, acelga, queso parmesano y huevo duro, la primera es frita y la otra al horno.

De ahí, comimos un betabel rostizado a las brasas, que es el que más piden desde que abrió el restaurante, lo preparan con mousse de queso de cabra, arúgula y aceite de hoja santa.

Y de pronto apareció el plato fuerte: Vacío y Picaña. Ambas son carne de EU calidad Choice Sterling Silver, en término inglés, a nuestro parecer el ideal para los cortes de carne, pero puedes pedirlo a tu gusto. Como guarnición unos pimientos verdes, naranjas, rojos y amarillos rellenos de queso, tradicional en las parillas de Argentina y Uruguay, y berenjena a la parrilla.

Tienen también Rib eye, New York y Entraña, cortes de Argentina. Nuestro maridaje fue con un vino rosado de Baja California, de la vinícola Retorno, pero hay varias opciones según tus gustos.

Sabores dulces y del mar

En Parrilla Paraíso te ofrecen en su menú pesca del día con sofrito de ajo y jitomate Cherry acompañado de puré de papa o Pulpo en adobo a las brasas con papa cascada y alioli de ajo, este último también lo probamos y pocos lugares saben prepararlo.

Y como siempre hay un espacio para el postre. El Mil hojas con crema de almendra, nos pareció interesante, sin dejar de mencionar la Tarta de chocolate amargo que puedes pedir ya sea con helado de queso de cabra e higos y fresas frescas o con helado de crema de naranja y toffee casero.

No dejan de sorprendernos

Ah, pero esperen, deben saber que en Parrilla Paraíso también hay cultura. En 2024 incorporaron una serie de actividades de la mano de Caleb Graupner, gestor cultural con muchos años de experiencia en el sector. Entonces puedes encontrar música en vivo los viernes, talleres para niños, narración oral con cuenta cuentos, o un círculo de creación literaria, por mencionar algunas.

Pero estas actividades no comenzaron nada más porque sí. Los dueños identificaron que el espacio del restaurante no sólo lo buscan para comer, sino que los asistentes van por algo más atractivo. Es así que la experiencia gastronómica se vuelve completamente integral.

El sabor de boca que nos llevamos de este restaurante no fue nada malo, y los cortes de carne parecían un poema mismo, así que la invitación es a que los conozcas.

Lo que debes saber

  • Dónde: Santa Úrsula 34, Sta Úrsula Xitla, Tlalpan, 14420, Ciudad de México.
  • IG: @parrillaparaiso
  • Es un restaurante Pet Friendly.

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