Cartier y el Arte Islámico, en busca de la modernidad

El Museo de Arte de Dallas y el Museé des Arts Décoratifs, París, en colaboración con la Maison Cartier presentan más de 400 objetos de las principales colecciones internacionales, incluido el Departamento de Artes Islámicas del Museo del Louvre y la Colección Keir de Arte Islámico en préstamo al Museo de Arte de Dallas hasta el 18 de septiembre de 2022.

Esta gran exposición rastrea la influencia del arte islámico en los objetos creados por Louis Cartier y los diseñadores de la gran joyería francesa Maison desde principios del siglo XX hasta la actualidad. Muestra cómo los diseñadores adaptaron formas y técnicas del arte, la arquitectura y la joyería islámicos, así como materiales de la India, Irán y las tierras árabes, sintetizándolos en un lenguaje estilístico moderno, revelando las inspiraciones, las innovaciones y las maravillas estéticas; una característica única de la casa Cartier.

Además, las tecnologías digitales ofrecerán información sobre el proceso creativo, desde un objeto fuente original hasta un motivo, su adaptación como diseño de joyería y, finalmente, su ejecución en metal, piedras y materiales orgánicos.

Es un deleite admirar joyas, dibujos y fotografías de archivo con ejemplos de arte islámico donde se aprecia la inspiración, adaptación y recombinación de motivos derivados de fuentes islámicas en el diseño para joyería y objetos de lujo. Estos incluyen una gama de formas geométricas a naturalistas y diseños chinos (cuellos de nubes y formas entrelazadas) que se naturalizaron en las tierras islámicas bajo los gobernantes mongoles y timúridas de Oriente Medio y la India desde el siglo XIII.

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Técnicas y estilos artísticos

Cabe destacar el aporte de los viajes del hermano menor de Louis, Jacques, a la India y Bahrein a principios del siglo XX, donde se aprecia las técnicas de inspiración derivadas de estos lugares y otras regiones vecinas, en la cual se importaron nuevos materiales para introducir en su trabajo, incluidas esmeraldas talladas y otras piedras preciosas grabadas multicolores.

Los descubrimientos obtenidos de estos viajes estimularon el uso de combinaciones de colores novedosas extraídas de fuentes islámicas, uno de los aspectos más distintivos de los diseños de principios del siglo XX de la Maison.

También inspiraron el uso de nuevas técnicas, sobre todo el estilo Tutti Frutti característico de la marca; a partir de la década de 1920, las propias piezas islámicas, como placas esmaltadas, fragmentos de cerámica, amuletos de piedra, textiles o miniaturas extraídas de pinturas, a veces se agrupaban en un stock llamadoapprêts e incorporados a las nuevas creaciones de Cartier.

La exposición rastrea cada uno de estos desarrollos estilísticos, vinculándolos con materiales de origen islámico real o probable y revelando la experiencia del ojo del joyero en la mediación de formas y la creación de algunos de los estilos más renombrados y reconocibles de Cartier en la actualidad.