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El mundo vinícola te da la oportunidad de viajar en busca de la experiencia del vino de la región.
Para los amantes del vino no hay escalas y horas de vuelo en las que no valga la pena la recompensa de llegar a tu destino vinero. 14 horas de vuelo, y 6 más atravesando los Andes, es la travesía perfecta para comenzar un recorrido por tierras Mendocinas.
Argentina implica pensar en futbol, a la vez que suena un tango en mi cabeza y suspiro cuando cierro los ojos y veo esa bella estampa de los Andes enmarcando su principal zona vinícola.
Para alguien que le gusta viajar y la comedera, como a mi, al hablar de uno de sus países vinícolas favoritos no puede evitar mencionar también su comida, sus momentos, el fernet, empanadas, pizza y cuanta comida se compartió en su estadía.
Este país es uno de los mayores productores de vino del cono sur del continente. Es el 5° productor a nivel mundial y en América es uno de los que consumen mayormente su propio producto. Entonces no es tan descabellado pensar que, “Vinos, Mendoza y Malbec” son la definición, en términos vinícolas, de este bello lugar.
La uva viajera
Malbec es la uva insignia del país y aunque el terruño vinícola en toda Argentina es bastante honesto, dinámico y brinda las condiciones para que se den a la perfección muchas otras variedades, como la Torrontés, Cabernet Sauvignon, Syrah, Tempranillo, la calidad de esta uva, de la Malbec, es de clase mundial.
Cabe señalar que a diferencia de lo que se cree, la Malbec no es una uva autóctona, es viajera como la gran mayoría de las que se plantan en América. Su origen es francés, de las seis permitidas en Burdeos, pero sólo como dato histórico, hoy día el mejor vino representante de esta uva es el argentino.
Y es esa la razón por la que encontramos en cada rincón una excepcional muestra de lo que en pocos años han logrado con esta uva. Cosechas especiales, vinificaciones, botellas, bodegas, etiquetas vanguardistas, fiestas como la “Degustación anual de Santa Julia” de Familia Zuccardi donde se pueden degustar más de 40 etiquetas de diferentes estilos y variedades y hasta el día de la Malbec que se originó en estas tierras, todo para dejar claro quien hace y de donde sale el mejor mosto, pero sobre todo para disfrutar de esto que saben hacer tan bien.
Me es muy difícil hablar de una uva sin pensar en un espacio y tiempo. Y así destaco Mendoza que es la región vinícola más importante del país. Donde respiras vino en cada rincón, desde el centro de la ciudad en sus wine bar, restaurantes y vinerías hasta salir de al campo a recorrer sus viñedos. Que magnifica experiencia la de disfrutar el vino, recorrer sus bodegas, los viñedos todos verdes y de fondo los Andes nevados.
Esta región cuenta con el clima perfecto para esta uva, ya que necesita mucho sol y al ser originalmente un desierto esta región, ayuda a su producción optima y nos da vinos de un color intenso que se pueden modificar al paso o no por madera o por si son jóvenes o ya pasaron un poco más de tiempo en botella, pero lo que los caracteriza es que siempre tendrán un aspecto robusto, oscuro y bien profundo.
Aromas afrutados cuando son jóvenes y una nariz compleja cuando envejecen bien en botella o madera, en boca un aspecto voluminoso, espeso, carnoso, pero siempre amable al paladar.
En la experiencia de los viajes gastronómicos no podemos disimular a la hora de probar su cultura a través de los sabores, es decir, siempre he creído que no hay bebida que no nazca del platillo típico de la región, existe la Malbec, de ese nivel, porque existen los asados, no hay nada mejor que pasar por una botella de ¡Hey Malbec! (mi Malbec favorito) llegar al asado y esperar por él con una copita bien llenita mientras disfrutas de los olores y las charlas domingueras y después degustar una jugosa carne acompañada de este vino tarde redonda.
No está demás contar, que siendo una región productora y agrícola por excelencia también se están creando otros productos, cuentan con aceites de oliva de alta calidad, porque como sabemos es casi ley que, donde haya vid hay olivo, producen queso y está en boga un gusto por la creación de cerveza artesanal.
Hay Ecoturismo para los aventureros y amantes de la naturaleza, Enoturismo para los que buscamos saborear las riquezas de la región y turismo tradicional para todos ellos que gustan de unas vacaciones tranquilas y conocer la región tradicionalmente.
Mendoza es el paraje perfecto para los amantes del vino y la vida sibarita. Es la región perfecta para conocer la Argentina de los vinos, los asados y del gusto por la naturaleza. ¡Salud!
