¿Qué tanto te preocupas por tu cabello al momento de viajar? Por lo general pensamos en nuestro outfit diario, y no sólo nos referimos a la ropa y accesorios, sino también al maquillaje y al peinado, pero algo que estamos seguras que no pensamos es cómo cuidamos nuestro cabello antes de dejarlo reluciente a la hora de salir de vacaciones.
Y es que tenemos hábitos que podríamos creer que no nos afectan en nada, e incluso, los realizamos con cierta naturalidad, sin embargo, las consecuencias de practicarlos dañan nuestra cabellera más de lo que te puedes imaginar. Te compartimos algunos para que de inmediato dejes de hacerlos.
Cepillar el cabello mojado
La situación aquí es: llevas todo el día en la alberca, y es hora de salir para comer o beber algo, lo primero que haces es agarrar tu peine o cepillo y comenzar a deshacer los nudos que se pudieron hacer mientras estabas en el agua. Justo aquí está el primer error: tratarlo bruscamente.
El cabello cuando está mojado es mucho más frágil, y de no cepillarlo correctamente puedes romperlo. La sugerencia aquí es que tomes tu toalla lo seques un poco para retirar el exceso de agua y te des unos minutos para ir a tu habitación a colocarte un poco de acondicionador para después de la ducha, esto lo que hará será suavizar las fibras capilares y desenredarlo con mayor facilidad.
Usar cualquier producto
Cada vez es más común que en los hoteles e incluso en las casas vacacionales que reservas por Airbnb, haya disponible shampoo y acondicionador, y la verdad es un gesto que se agradece porque te sacarán de un apuro cuando te das cuenta que olvidaste tus productos de cuidado del cabello.
Pero, viene aquí el pero, siempre debemos procurar utilizar productos que se adapten a nuestras necesidades y que realmente den una protección a nuestro cuero cabelludo, ya sea cremas para peinar, para hidratar o simplemente el producto con el que lo lavamos.

Lavarlo con agua muy caliente
Pensemos que estás en un destino en donde las temperaturas son muy bajas y lo primero que haces al preparar todo para la regadera es poner el agua lo más caliente posible, aquí es donde está el error.
No está mal que te guste bañarte así, pero lo que sí es un mal hábito es que tu cabello reciba esas temperaturas tan altas, pues aunque no lo creas tu cuero cabelludo se puede resecar o perder su brillo. Esto se debe a que las altas temperaturas eliminan los aceites naturales.
Lo que podrías hacer es usar una gorra de baño y una vez que terminaste tu rutina, ahora sí es momento del cabello, pero regula un poco la temperatura del agua, incluso en el último enjuague para sellar la cutícula utilizar agua fría.
Amarrarlo sin cuidado
¿No les pasa que podemos tener cientos de ligas para el cabello, pero hay momentos en los que no encontramos ninguna? Bueno, si lo pensamos, eso podría ser algo bueno, porque nos haría ir a comprar nuevas ligas (procurando que la historia no se repita y las perdamos), pero algo fundamental es que compremos ligas apropiadas.
Te sugerimos que te olvides de aquellas que son muy ásperas, o que incluso tengan una pequeña unión de metal, porque si bien lo más cómodo es recogerse el cabello, pero qué es lo que pasa al momento de quitártelas, sólo las jalas, y si no son de un buen material entonces o te lo jalan o te lo quiebran, y eso lo que hace es debilitar tu cuero cabelludo. Hay algunas que no tienen costuras y están hechas con materiales muy suaves y sin texturas, esas son las mejores.
El cuidado del cabello no es algo que debamos dejar en último lugar, también es parte de nuestra personalidad. Rizado, lacio, quebrado, corto, largo, en fin, no importa el tipo de cabello que tengas, siempre utiliza productos que se adapten a tus necesidades para que luzcas increíble.
Y lo mejor de todo es que con simples acciones, nuestro cabello lucirá de lo mejor, aún cuando estamos de vacaciones.
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